sábado, diciembre 06, 2008

MEMES

No es el sonido onomatopéyico de una oveja. La primera vez que lo escuche (o leí) fue de Lair Riveiro, el sabio brasilero, puesto que necesitaba preparar una clase acerca de la bipolaridad funcional del cerebro y sabía que el señor es un gurú en el tema.
El tema es, que en una parte del libro, te dice que si quieres saltar al final para saber que son los memes, lo puedes hacer. Uno que anda en el tema del aprendizaje y el conocimiento, no puede dejar pasar el interés que despierta una nueva teoría sobre la transferencia del conocimiento.
La verdad es que ya han pasado como seis meses de la lectura y posteriores investigaciones, y todavía siento que ni entiendo y que no sé nada sobre el tema. Siempre digo en clase, que la mejor manera de aprender, es tratar de enseñar. Si eso es cierto, entonces me voy a aventurar a hablar sobre los “memes”.
Según Wikipedia, “Un meme es, (según las modernas teorías sobre la difusión cultural), la unidad teórica de información cultural transmisible de un individuo a otro o de una mente a otra (o de una generación a la siguiente). Es un neologismo acuñado por Richard Dawkins en El gen egoísta, por la semejanza fonética con gen y para señalar la similitud radical con la memoria y la mímesis”.
Un meme entonces, es una unidad cultural que puede replicarse y pasar de una persona a otra, o de generación en generación, dándole características culturales y de conocimiento a la transferencia. Ya lo decía Nonaka y Takeuchi, dos expertos japonenses en gestión del Conocimiento, que la transferencia de información puede ocurrir en los ámbitos tácito y explícito, que son las dos formas en las que reside el conocimiento. Un padre enseñando a montar bicicleta a su hijo o una madre preparando las “hallacas” caraqueñas en navidad, junto a su hija que la ayuda, son ejemplos de tácitos. La lectura de un libro es explícito.
En estos días hice una reflexión. En la universidad donde imparto cátedra no es obligatoria la asistencia. ¿Porqué irían o dejarían de ir a algunas de sus clases? (Es un reto enorme en esas condiciones, mantener al menos el 60% de la asistencia). Si no van, siempre pueden acudir a los libros y buscar en ellos, por lo que sería explícito a explícito. No se garantiza la transferencia. Un alumno debería ir a clases, para recibir nuevas estructuras de conocimiento, y poder estructurar nuevas, debería ir a clases, porque el tipo, hizo un esfuerzo por preparar el tema, debería ir, porque la escena no la sustituye un libro, y por último debería ir, porque es deber del docente, transferir de forma tácita lo que sabe, cosa que se transmite por los gestos, por la voz, por el mensaje, por las vivencias, por lo que vivió y por lo que no, por lo que sabe y por lo que espera recibir de su audiencia. Además de todo, por si la teoría de los memes es verdad..!!
Tener la oportunidad de tocar el alma de la generación siguiente, es realmente mágico.
Alberto

2 comentarios:

Clara Machado dijo...

Wow...el tema es complejo, pero interesante...si tarde o temprano se arrepienten de no haber ido a clases, lo malo es que cuando uno es chamo no se da cuenta.

Facility manager dijo...

ASi es, Manuela. Lamentablemente las materias enfocadas a postgrado están basadas generalmente, en la experiencia. Es un poco, indicar donde están las piedras y que hacer para que no te golpees. En los libros está lo que digo; la forma de contarlo, no.
Por eso es tan importante asistir a clases.
Me encantan tus últimos escritos Manuela, disfruto mucho leyéndote
Alberto